En una ocasión, el fundador del fascismo español, Primo de Rivera, explicó la contradicción interna de la decisión democrática con un ejemplo que a él (y a muchos) les pareció de cajón. Decía el ‘Fundador’ que la Verdad con mayúscula escapaba por sí sola al procedimiento del debate puesto que si, un poner, un Parlamento decidiera que Dios no existe habría sentado un peligroso precedente de una mentira legal. Las Cámaras valen para lo que valen y santas pascuas, es decir, pueden servir –razonaba aquel pensador—para decidir trámites que afecten a la vida contingente y sus complicaciones pero en absoluto para dilucidar entre al verdad y la mentira, o si se prefiere, entre la Verdad y el Error, habida cuenta de que, más allá y por encima de la ficción hipostática, una reunión de señores, por muy electos que sean, no tiene por qué garantizar la primera. Estos días se va a debatir en la comisión de Cooperación Internacional del Congreso una incómoda iniciativa de IU-ICV que quiere que la Cámara se pronuncie sobre la notable pamplina que, en materia de condones, lanzó el Papa nada menos que en Camerún (un país azotado sin piedad por la pandemia del sida), o sea, si no he entendido mal, que el Congreso decrete si el papa lleva o no lleva razón en algo que, por otra parte, nadie discute. No se trata, evidentemente, de asistir a un país asolado por aquel contagio sino de sentar laica cátedra, con las del beri, en torno a una opinión que no deja de ser personal, por muy papa que un papa sea, sobre todo teniendo en cuenta que hablamos de un célibe. Qué verdad es eso del adagio vulgar de que cuando el diablo no tiene que hacer, con el rabo mata moscas.
Siento que me repito, pero es que los hechos (la gripe porcina, el duelo de ‘princesas’ o el zambombazo del Barça) están haciendo buena mi preocupada sugerencia de que la necesidad de ocultar los rigores de la crisis están dando paso a una imprevisible serie de novedades y alarmas que lo más probable es que no vayan a ninguna parte pero que, de momento, ocupan los titulares y, con ellos, la capacidad de atención de la grey indefensa. ¡Qué querrán que salga de ese falso debate si hasta hay diputados de la oposición conservadora contrarios al dislate papal! Se trata, obviamente, de armar ruido –mediático sobre todo–, entre otras cosas porque, desgraciadamente, nada de lo que pueda establecer el criterio, bueno o malo, de nuestros parlamentos cívicos influirá lo más mínimo en actitudes que, por incomprensibles que nos resulten, han sido pesadas y sopesadas antes de ser lanzadas al aire. La verdad es que uno tiene la triste sensación de que cualquier día esta panda hace realidad la hipótesis grotesca de Primo con tal de escapar a la realidad, que es la que aprieta.
Me parece que lo que les falta a nuestros políticos para perder el poco prestigio que les queda es dedicarse a debatir tonterías para crear titulares.
Ya decidió la asamblea revolucionaria francesa que Dios no existe. ¿Quieren más?
Creo que se olvida usted, don Griyo, de que el objetivo de esos memos en provocar una situación hostil a la Iglñesia Católica. Han terminado uigual que los fascistas del tardotranquismo y pronto gritarán «Rouco al paredón», aunque sea sin rima.
Patética imagen la de Llamazares, enano, solitario, isn oficio ni beneficio dentro de poco, inventando camorras que sabe de antemano que serán apoyadas por la cerrilidad de otros. Lo del Papa no lo discute nadie, como dice jagm, porque es absurda su afirmación. Eso hace gratuita una reprobación porm parte de este CVonmgreso que no tiene arte ni parte en el asunto. Pero el anticatolicismo, la antioreligión incluios, están siendo utiulizadas por partidos y Gobiernos cono muletas para burlar al toro mde los problemas reales, la crisis sobre todo. A Llamazares no se le ocurre nada mejor, ¡con lo que cobra por estar sentado donde está! Vaya por Dios.
Tiene don Jose António más razón que un santo: dentro de poco nos inventan otro monstruo del Loch Ness, con tal de hablar de lo que no duele.
Aquí, en Francia, no me había enterado del «duelo entre princesas».
José António Primo de Rivera tenía toda la razón del mundo cuando opinaba sobre la relatividad de la democracia o si prefieren de «la contradicción interna de la decisión democrática». La Verdad es una tautología y no se puede debatir.
En cuanto a la opinión del Papa, es normal que oficialmente la tenga y es normal que tengamos otra. Sin embargo, la posición y los actos de la iglesia son más moderados.
Besos a todos.
Una servidora tiene la seguridad de que la mayoría de quienes ponen de vuelta y media a Benito Dieciseis no han leído sus famosas declaraciones. Sino que han oído que alguien ha dicho, que se enteró por otro de que un quidam le había comentado haber oído que alguien había leído que el Papa había dicho no sé qué de los condones.
He hecho una pequeña prueba que ha requerido algo de tiempo. Le pido a google ‘papa+camerun+condon’ y me da unas 30.000 repsuestas, y en las pa´ginas que me he tomado la molestia de abrir, unas veinte, de ocho entradas distintas, todas son notas de prensa, más de opinión que de información. Pienso que no me vale y hago una segunda petición a google: con comillas » palabras textuales papa camerun condon» y me responde nuestro sabio interlocutor: Información No se ha encontrado ningún resultado para «palabras textuales papa camerun condon».
O sea que todo el mundo(?) opina sobre frases que no voy a afirmar rotundamente que sean sacadas de contexto, pero que fuentes-fuentes, lo que se dice fuentes, las maneja poca gente. Sí entresaco -fuera de contexto, of course- un par de frases que me hacen pensar: «»La Iglesia no impone modelos culturales” y «nuestra propuesta es la fidelidad dentro del matrimonio heterosexual, la castidad y la abstinencia». Quien sepa algo del concepto de fidelidad matrimonial que suele tener el hombre negro -y llámenme racista cuantas vecs quieran- verá que algo de razón sí lleva el pastor alemán.
Una no va de conservata, ni de estrecha, ni mucho menos de papista. Pero hasta que no consiga empaparme de qué y cómo dijo las cosas don Benito -en ello estoy-, no voy a caer en descalificaciones de ningún tipo.
Excepto para el pobre Llamazares and co. a quienes considero una punta de indigentes mentales, zafios, sectarios e inmorales. En sentido estricto.
Lo extraño es que en la web de IU tampoco aparecen las famosas declaraciones. Si aparecen, en cambio. múltiples referencias a la libertad de expresión de «El Jueves», pero no encuentro las palabras «Papa» o «Benedicto».
Como curiosidad, y abundando en la investigación googleana hecha por Scéptika, resulta que una búsqueda por las palabras textuales del papa arroja más más sitios web «pro- Papa» que «anti».
Saludos cordiales
Bueno, lo que parece que quiere IU, con don Llamazares o sin él, es que digamos democráticamente a la mitad del mundo, católicos y afines más los que piensan con su propia cabeza, que somos imbéciles, como ya han hecho los belgas. Pues yo me pido que no.
A mi doña Scéptika: todos los hombres infieles, y no son pocos, que yo conozco son blancos.
Los de IU tienen poco en la cabeza. Si tuvieran algo le sobrarían temas y motivos para entretener a un Parlamento que tampoco es que sea una Academia platónica. Anmtes el anticlericalismo se bastaba a sí mismo para su tarea. Ahora hemos de pagar a esta manta de inútiles para que, a su vez, propongan a la «representación de la soberanía nacional» quie le haga su tarea.
Estúpida iniciativa, copiada además, que nos llevaría a convertir al Parlamento en lo que en absoluto es: en un tribunal de opinión. IU no tienen bnada que hacer aparte de, en efecto, «matar moscas con el rabo», como dice con gracia el columnista, y aún ése es envargo que le queda grande a tan pequeños enredadores.
Disparate de idea, maliciosa y descarada maniobra cotra la Iglesia por parte de quienes callan, por ejemplo, y hasta justifican los crímenes de «sus» dictaduras. Una pregunta. ¿qué harán una vez que el Congreso dijera lo que dice la mayoría sinn necesidad de tantas etiquetas, es decir, que el Papa se quivocó en lo que dijo? ¿Por qué nop desentierran el tema del GAL a propósito del envaine de lengua de «su» alcaldesa Rosa Aguilar? En fin, don ja dirían que son unos «menbrillos» y yo lo rubrico, aunque teniendo en cuenta lo poco que tiene que decir esos futuros «parados», se explica su iniciativa.
No merece la pena perder el tiempo con gente como ésa, tan banal y arbitraria, tan poco razonable. Es una fortuna que por fin desaparezcan del mapa político, no proque yo crea que en España sobran políticos de izuqierda sino porqu eme parece peor todavía que encajen en ese papel a gusarapos como Llamazares. En cuanto a lo del Papa Beniro, como dice nuestra Scéptika, ni que decir tiene que costaría trabajo encontrar a alguien que, incluso reclamando respeto para su libertad de opinión, no reconozca una metedura de pata tan sensacional.
Por alus, mi don Griyo. Tal vez he utilizado mal la expresión, al copiarla del texto pontifical: fidelidad. Tal vez se entienda mejor la idea que quería expresar si lo hago con su antónimo: promiscuidad. La promiscuidad del hombre negro, insisto del hombre negro, que no la mujer posiblemente clitorictemizada, no se trata ciertamente de una leyenda urbana. Hay una concausa si se me permite el palabro: quienes no tienen prácricamente ninguna posibilidad de ocio, encauzan este al uso y disfrute permanente de su serpiente negra.(*)
Insisto en que no me importa un pimiento que me tilden una y mil veces de racista, pero sé de lo que hablo. En un estudio sobre Epidemiología del cáncer de próstata, publicado por la revista ONCOLOGY (Clinical and Translational Oncology. Oct. 2007) se recoge textualmente su asociación con los niveles altos o muy altos de testosterona …»grandes diferencias en la distribución de acuerdo con la raza y la región geográfica. Las tasas más elevadas se observan en los africanos y afroamericanos y las más bajas en los habitantes de China y Japón» (Se admite alguna broma sobre los legendarios ‘pitiminís’ de los orientales).
Se habla mucho de los millones de muertes por sida en el subcontinente sur africano, pero se suele obviar que las relaciones homosexuales son la excepción. Sin embargo la prostitución es casi un oficio habitual femenino y la causa principal de los numerosísimos contagios. La frecuencia en el uso del condon incentivaría aún más la promiscuidad en la alegre ignorancia, pero lo lógico es que si esta aumenta, aumentaría casi exponencialmente el contagio porque la mayoría, como ahora, seguiría considerándolo como mínimo un estorbo y cosas peores. No estaba tan descaminado pues el Pontífice en sus declaraciones, que por fin he conseguido aunque parcialemente, como parece haber común acuerdo.
¿Y lo que disfruto nadando contracorriente. Juas, juas).
(*) Que se la pelen hasta el desollamiento.
Doña ScéptiKa, brillante demonstración, pero lo que me ha gustado mas fue el último paréntesis .
Besos de nuevo
La última observación pseudocientífica de Scéptika es temeraria. No se debe jugar con este tipo de temas. El lucimiento no lo justifica todo.
estos personajes se aprovechan de los momentos mediaticos como el caso de Marta entre otros para tapar todo lo que se les esta cayendo encima por estar sin dar palo al agua durante años en lugar de trabajar asistir a plenos y votar para que el pais vaya mejor. un saludo Don Jose Antonio