Me ha dado un vuelco el corazón al leer en la prensa argentina que un pueblo español y andaluz, Pulpí, había entrado por la puerta grande en el libro Guiness de los récords. ¿Qué nueva tecnología, qué desconocidos primores labriegos, qué novedosas ‘I+D+I’ –me he preguntado– habrán improvisado estos paisanos en medio de esa zona milagrosa que ha conquistado los mercados europeos? Mi gozo en un pozo: lo que alza a la fama a Pulpí es el récord de ensaladas, conquistado al confeccionar una gigante de 6.700 kilos de tomates, pepinos, cebollas, pimientos y rabanitos que añadir a cuatro toneladas de lechugas de varias especies. De nuevo hay que preguntar si ésta es la “Tercera Modernización” que nos vienen prometiendo, qué tienen que ver estas ensaladas con las promesas de “I+D+I” de las que malvive dialécticamente esta autonomía a la deriva, y si nuestra perspectiva vital se mantendrá mucho tiempo todavía en este horizonte paleto. ¡Una ensalada gigante y diez pueblos sin agua potable! Tantos años después seguimos estando más cerca de Marruecos que de California.
¿Qué es eso T+P+C?