El mismísimo presidente del Consejo Superior del Poder Judicial de Andalucía ha viajado hasta Sevilla para reunirse con los jueces que arrastran la instrucción del «caso ERE» y — lo que a uno le parece más inquietante– con los magistrados que andan redactando la sentencia del caso que, según el ilustre visitante, parece que saldrá pronto, tal vez coincidiendo con la campaña electoral. ¿No es algo desconcertante esa noticia, no resulta algo impropia tanta solicitud en el momento más delicado y, por qué no decirlo, más sospechoso? Y encima dice su Señoría que los «medios» deben cuidarse de no acrecentar la desconfianza del peatón en la Justicia. ¿Reunión de pastores, oveja muerta? Esperemos del buen sentido de esos rabadanes que el refrán no se confirme y menos en fechas tan comprometidas.