Grave denuncia de los maestros andaluces. Según ellos, con los dispendios en ‘ordenatas’ regalados y otros trebejos didácticos de la postmodernidad, se ha agotado el dinero presupuestado de manera que no quedan recursos para pagar los maestros que faltan por vacantes. Dicen ellos –que son quiénes mejor conocen el cotarro—que hay una legión de profesionales, con las oposiciones aprobadas incluso, que aguarda mano sobre mano mientras los niños entretienen en tiempo escolar jugando y sin dirección pedagógica. Tómese nota de la queja para cuando llegue el momento de hablar de nuevo sobre el fracaso y el abandono escolar que la Junta está abonando con esos brindis al sol.