No sé qué inquietudes ha disipado Griñán en los empresarios en relación con los comunistas que co-gobiernan con él, ya que los mandapoco de IU, a pesar de todo, y como entiende parte de la militancia radical, van a estar en ese Gobierno de fieles como gallos (o gallinas) en corral ajeno. Pero había prisas por tocar pelo y Valderas ha hecho una faena de aliño en la que se ha conformado con que le dejen el quite de cortesía. ¿Será este gobiernillo la tumba de IU? Pues no es nada improbable, pero la política tiene un lado humano y depredador que no puede olvidarse. Por la utopía nadie da un duro a estas alturas. Lo único que se cotiza ya en este mercado es la nómina.