No se le puede negar a ZP haber simplificado el mapa político eliminando de él a los minoritarios que se prestaron a figurar de comparsas en su impreciso proyecto. Ha logrado, en definitiva, algo por lo que venía clamando buena parte de la opinión, a saber, que esos grupos minúsculos pesaran tanto en la vida pública representando a tan pocos ciudadanos, pero no lo ha conseguido por derecho, o sea, modificando una ley electoral perfectamemte injusta –Rosa Díez con 300.000 votos tiene un escaño y el BNG con 100.000 menos tiene dos, los mismos que logra CC con 150.000 menos- sino por simple fagocitación de su electorado. Oyendo a Llamazares repetir esa ocurrencia del “tsunami bipartista” se le ocurre a cualquiera que lo que ha ocurrido no es ni más ni menos que sus votantes, sabedores de que el voto a IU acabaría en el PSOE, han decidido ir sin rodeos acudir directamente a fábrica y liquidar la sucursal, lo mismo que la debacle del andalucismo de partido se remonta al pacto leonino que en su día salvó a Chaves de una quema que resultaba inminente. El problema, sin embargo, no es el bipartidismo en sí, un régimen alternativo clásico en España, sino la creciente sectarización del país, la fractura en dos de mitades (y pico) de una nación amenazada, por lo demás, de una eventual disgregación territorial al menos tres comunidades. La corresponsal del Financial Times, Leslie Crawford, denunciaba ese envilecedor proceso no hace mucho denunciando la instalación del sectarismo en los partidos y en la prensa, dando lugar a una situación en que “ni se concibe ni se te perdona el afán de independencia”, y dejando claro que la víctima principal de esta gangrena es la Verdad. Perop más clara todavía resultaba la observación de Francesc de Carreras al definir el sectarismo como la disposición a considerar que los tuyos siempre tienen razón hagan lo que hagan y digan lo que digan”. Falta añadir: y la voluntad de destruir al rival. La noche del domingo, a las puestas del PSOE o a las del PP, los irreductibles –foto fija de la mayoría invisible– celebraban su triunfo tanto o menos que se ensañaban con el Otro. ¿España bipartista? Más bien España sectaria.
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Lo que me gusta también de usted , no es sólamente su valentía, y su hablar claro a la faz de todos, sino también que se esfuerze siempre en ver lo bueno que puede aportar una nueva situación. E
Es verdad: algo bueno puede salir de esta nueva repartición, en donde se puede gobernar sin tener que dar prendas a los autonomistas, y sin necesariamente tener que insultar al oponente. Veremos si es la visión de gobernar de este presidente.
A cuerpo limpio. A banderillear con mis toscos palitroques después de la faena de capa del Maestro. ¿Habrá hoy también palcos vacíos? ¿Seguirán los sabios señores sabios en sus cátedras, en sus confesionarios de pueblo, en sus volterianas piruetas, en sus textos de historia, de geografía, de lingüística, de altas metafísicas o absorbidos en los misterios inmarcesibles de los oscuros microscopios electrónicos? ¿Estarán en sus parques naturales observando la nidificación del chorlitejo común o en los impolutos edificios inteligentes desgranando los saberes que solo se conocen en el vértice de las rutilantes pirámides de la ciencia?
Aritmética electoral tramposa. Pues claro. Pero los fulleros, los tahúres tan a gustito que juegan con esas cartas marcadas. Hoy por mí, mañana por tí. Y si vienen muy mal dadas, ahí está el huerto del Francés, para meterse el caño de la pistola en la boca o la higuera con su cuerda y lazo preparados.
España sectaria. Pues claro. Bético no es quien ama al Betis, sino el que quiere que el Sevilla pierda hasta en los entrenamientos. Coliblancos contra colinegros. Los moraos contra los verdes. Los canis contra los pijos. Los de artillería contra los infantes. La cruz de arriba compra los cohetes más potentes no para que estallen de alegría sino para ganarles a los de la cruz de abajo.
Ahí están los dos gañanes, hasta la rodillas en la mierda, que no el barro, para arrear garrotazos hasta que al otro le salgan los sesos por la nariz mientras él se sorbe los suyos propios.
¿Qué creíamos, que la EGB de Villar Palasí del 70 -todos bachilleres elementales obligatorios- o la lode sociata del 85 que parió a su nefasta nieta la logse con 5 añitos o la nieta de la nieta van a remediar los males del XIX, del XVIII y así hasta llegar al conde don Julián? ¿No se dan cuenta de que la derecha aporta a gente de oposiciones duras, registradores o hacendistas, que no saben cómo se cocina un huevo duro y la izquierda erige a las medianías, que terminaron derecho con fatiguitas, pero con papás pudientes que sufragaban los años del niño rebelde en la facultad? Estos sí saben preparar los potitos pero han olvidado el poco derecho que estudiaron (?), mejor dicho, aprobaron por los pelos.
País de abogados. Pleitos tengas y los ganes, que tratar con picapleitos ya es condena. Solo falta que el ^^ fiche al del mechón y la voz atiplada, que el multiorgásmico del habla dulzona sea ministro de colonoscopias, que la chica embarazada, sí hombre, esa que se parece a la Esteban, sea ministra de sonrisas y dentición, o el ilustre bachiller Albo sea ministro de agricultura y empanadas de lamprea.
Este es el país, o la nación, o el pluricauntry o el polipasto. Esto es lo que hay. Un ejemplo: Josele RM se fue con mi don Miller de loquero y nos dejó aquí al Alejandro para que paseara a la momia, pero esta se la apropiaron los disléxicos y los patanes. Pues así, tó seguío. Y repito, bachimorcilla, e-s-t-o e-s l-o q-u-e h-a-y. Y no se correrán más toros que los anunciaos. Y por no saber firmar el alcalde, pongo yo mi huella. El secretario.
18:10
“eliminando de él a los minoritarios que se prestaron a figurar de comparsas en su impreciso proyecto.” es el justo destino de los mamporreros pero esta vez ha sido pura chamba.,” sino por simple fagocitación de su electorado”
Sepa, mi buena Bachi, que algunos nos hemos retraido por impedimentos distintos, otros por presumir que el jefe anda algo abrumado con lo divino y lo humano. Porque él está aquí presente, aunque discretamente se oculte, y hace un rato me encomiaba sus textos de usted precisamente. Estos días, lo noto algo lejano de sus sociologías de lo cotidiano, sin humor para esas levedades tan profundas. Y suponmgo que como yo, lo saben otros blogueros que, como yo también, estarán de acuerdo entero con el texto de hoy o el de ayer.
Ya que el Páter ha roto el fuego, me sumo a la explicación, y añado que algunos no estamos de humor ante estos incomprensibles acontecimientos, no por el signo de los resultados recientes, sino por las extrañas circunstancias que estamos viviendo. Igual me paso de pesimista hoy, pero supongo que hay mucha gente desorientada tras esta agotadora campaña dualista que nos deja sin grandes esperanzas.
Me llama la atención que, como el anfitrión, han sido muchos los observadores que parecen incapaces ya de soportar este sistema electoral trucado desde los inicios. Probablemente haya mucha gente para la que, como a él, como a mí, como seguro que a muchos de nosotros, esto empieza a parecerse demasiado a una farsa.
La cursi de la vieja, el oráculo que imparte doctrina, el resto de los carcas de la página no se repone del tropezón, verdad?
La reducción del nacionalismo deja las cosas como estaban en un principio: con una CiU catalana convertida en árbitro a pesar de no tener más que 740.000 voces detrás, y un PNV dispuesto a partir peras con el neogonzalismo. Ja lo ha visto muy bien y explicaod mejor: Dos España y pico. Lo malo es el pico, don josé antonio.
Está equivocado, además de ser un memo, ese Sociata, porque hay mucho ciudadano de izquierda, empezando por mí, que hemos votado PP por primera vez ante la evidencia del aventurerismo de estos locos. Los nacionalismos se han empequeñecido, han perdido peso, pero ahí están todavía el PNV y CiU en tratos con un Gobierno sin fuerza suficiente en Madrid. Nos van a sacar las mantecas otra vez, solo que previsiblemente sin tanto ruido, a lo Pujol…
Este mapa «simplificado» tiene graves problemas, querido amigo. Vamos a verlo enseguida, con los mismos tratos postelectorales, dado que el «triunfador» viuelve a depender de los que tratan de despiezar España. ¿O ustedes creen que esos tiburones de CiU van a apoyar más barato que Carod Rovira?
Ha habido satisfacciones, como ver, en efecto, el acuraillo secesionista disolviéndose en el chocolate del loro de estos social-oportunistas. Pero estoy con mis anteriores colegas en que la situación va a ser difícil. Lo de Andalucía demuestra que esta democracia ha degenerado porque ningún partido puede escapar a la corrupción tras 30 años en el Poder. Y lo de las 2 Españas y pico es una verdad como un templo. Malos tiempos se nos vienen encima.
19:17
Tiene razón don Heródoto porque CIU ha aprendido de Carod Rovira el memo entreguista que tiene delante.
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Advierto al cabo de un rato que se borró mi comentario anterior, no alcanzo a comprender cómo. No lo repetiré (era demasiado pesimista quizás) sino para adherirme al razonamiento de la columna y a ese avsio sobre la SECTARIZACIÓN de nuestra sociedad, más dual hoy que nunca desde la GC, sin duda como consecuencia de las políticas seguidas durante la legislatura que acaba ahora. Salir de las sectas es la tarea urgente que tendrán que abordar los partidos responsables, siempre que este adjetivo se le pueda aplicar a alguno de ellos por completo.
La noche de las elecciones fue lo más parecido a un «derbi» futbolero, a un apostadero boxístico. Me dio vergüenza de pertenecer a esta nación envilecida artificialmente y me admiró la capacidad degenerativa que tiene la política.
Vos no sabés lo que tenés, queridos, por más que espíritus sensibles como el de mi don josian se duelan ante el espectáculo de las vilezas políticas. Y entiendo que no vale lo de mal de muchos consuelo de tontos, ¿eh?, pero tenía que decirlo.
Aquí me tienen, arrodillada, vestida de saco y cubierta la escasa pelambre de ceniza. Perdón, hermanos coblogueros. He pecado y conscientemente. He extraído todo el veneno para ponerlo en mi aguijón y os he nombrado, uno a uno en mis picaduras.
Aún hay pieles sensibles y en la práctica totalidad habeis respondido a mi bífida. Gracias a todos. Y perdón, de nuevo. Se conforta el alma sabiendo que somos muchos. La inmensa minoría.
Hasta el sociata guripa de guardia ha piado. Puedes mantener la mano en primer tiempo de saludo, sorche. Tus señoritos te darán tu puñado de alfalfa fresca.