Pavorosa crónica negra andaluza. A la espera de la decisión del jurado en el terrible “caso Bretón” de los niños desaparecidos, nos enteramos de que el abusador y asesino de la niña onubense Mari Luz se entretiene en la cárcel tratando de “apadrinar” niñas lejanas, sabe Dios con qué intenciones, mientras los rigores de la canícula paralizan de momento la incansable búsqueda del cuerpo de Marta del Castillo que unos desalmados esconden entreteniéndose en burlar impunemente a la Policía y a la Justicia. Algo falla en el sistema de control social. Algo que hace que decrezca día tras día la confianza y el buen sentido de la gente.