Tres huelgas sanitarias se anuncian para una sola semana y una voz autorizada deja caer desde el propio SAS un aviso desconcertante –“Hay que asumir que no habrá más médicos de Primaria en Andalucía y que no los habrá en los próximos once años”—mientras el Colegio de Médicos sevillano afirma que sin la medicina “privada”, la “pública” iría lista de papeles. ¿Once años sin médicos a los que contratar? ¿Y la legión de sanitarios emigrantes forzados por el menosprecio que aquí se les da? ¿No sería posible que la Junta planeara su repatriación? El gran analista John Müller, por su parte, habla de la “sindemia” que nos acecha y constata que cada día crece el número de familias que buscan refugio sanitario en los seguros privados. Esto parece más una crisis estructural que un episodio pasajero.