En el pleno del Ayuntamiento de la capital., graves exigencias de ayudas e iniciativas dirigidas al alcalde por los trabajadores de Ercros, bajo la batuta partidista de UGT, como si esa empresa no fuera más bien cosa de Palos que es donde está instalada. Y una moción de IU apoyando las demandas que fue apoyada con los votos del PP en contra de los del PSOE que, por lo que se ve considera que le defensa de los trabajadores le corresponde por derecho divino pero que en caso de ser patrocinada por otros debe ser rechazada. Conmigo o sin mí, así de fácil. No sé qué andará pensando la muy partidista UGT onubense tras esta nueva demostración de incoherencia producida en el otro extremo de su correa de transimisión.