Propios y ajenos
Se comprende que los sindicatos llamados “de clase” vendan su gestión lo mejor que puedan entre sus anónimos defendidos. Por eso sacan a la calle a los interinos de la Junta “no amiga” (a la otra, ni reñirle durante medio siglo) exigiendo su estabilidad. ¿Pero hacen lo mismo con sus propios trabajadores? Pues no lo…