Primera sesión
A juzgar por una primera impresión, no parece que vaya a resultarle fácil al futuro Gobierno autónomo bandearse en su Parlamento. No había más que oír jurar el cargo a sus Señorías para entrever la fractura íntima de una Cámara que precisa de tres fórmulas promisorias –cuesta entender, desde luego, por qué no se establece…