El sabio solitario

Don Julio Caro Baroja vivía frente al Retiro, en un piso alto del número 50 de Alfonso XII, desde la ventana de cuyo despacho contemplábamos en otoño el vasto mar de oro viejo del parque. Don Julio nos citaba a media mañana y aparecía indefectiblemente con su atuendo britanizante –¡aquellas chaquetas de tweed sobre el…