Corrido triste
No encuentra sosiego mi amigo mexicano ante las noticias que le ven llegando desde su país. Sobre todo la del catastrófico incendio del casino de Monterrey en el que una banda delincuente, apenas un pelotón de “pelaos”, en vaya usted a saber qué ajuste de cuentas, acabaron abrasando vivas a cincuenta personas. Me enseña mi…