El fantasma fiscal

Soy el primero en comprender que la aplicación del derecho, la jodida e imprescindible Ley, es un asunto inevitablemente formal. ¡Qué sería de nosotros, criaturas desvalidas, sin esa garantía supina que supone el formalismo y nada digo en caso de faltarnos la facultad interpretativa del juzgador! Pues una ruina. Fíjense en el caso que le…