El canguro de Noé
No descansa la carcundia americana, especialmente esa división creacionista que tan descomunal batalla mantiene con las huestes del evolucionismo darviniano, es decir, con la práctica totalidad de la comunidad científica contemporánea, descontados de ella los cerebros que Arthur Clarke –el novelista de ficción cuya imaginación abrió el camino a la comunicación por satélite o al…