Retablo de maravillas
Cada día nos sirven una ración maravillosa. La última ésa de recusar a un testigo en el juicio por el sobornazo que se celebra –¡seis años después!— en Sanlúcar de Barrameda, al parecer por escuchar determinada emisora de radio. Maravilloso que se tarde esa eternidad en sustancia un pleito pueblerino en el que unos presuntos…