Falta coraje. A esta oposición andaluza, como al Gobierno de la nación, les falta determinación ante los disparates que promueve un PSOE sovietizado por su alianza con IU, que no duda en liquidar al derecho constitucional a la propiedad y, en un gesto para la galería que busca de paso tapar la infamia de los ERE, expropiar las viviendas a sus legítimos dueños. En Madrid, la derecha ha sacado su parque inmobiliario y lo ha puesto a disposición de los desahuciados. Aquí se propone la confiscación demagógica y lo más que hace el PP es quejarse. ¡Todo el poder para el soviet! Griñán, con tal de mantenerse en pie, parece dispuesto a retroceder a donde haga falta.
Exacto: la gente no se atreve a decir alto y fuerte lo que siente o piensa, por temor a ser estigmatizado «de derechas». Ser de derechas ahora es como cometer un pecado mortal para un católico o tener una tara para una futura e hipotética suegra.
Y es que, salvo en los paises sajones, te estigmatizan si te atreves a no estar de acuerdo con la tropa y las medias. Es de pena.