Varios altos cargos de la Junta han recurrido la recusación del PP del juez que antes fue alto cargo de la Junta. Normal. Ellos dirán que o todos o ninguno, y en consecuencia, que si Chaves y Griñán van a gozar de ese privilegio que supone ser sentenciado por un antiguo subordinado, a ver por qué ellos no van a participar de la misma bicoca. Nunca un juez fue tan ansiado por sus justiciables y, ya digo, era de esperar, por mucho que a alguna defensa le resulte “descabellada” la idea que se opone a que un escandalazo como el saqueo de los ERE termine en manos de “un agradecido correligionario político amigo de los acusados” (sic). ¡Lo que hay que oír! Lo que aquí se juega no son los intereses de éstos sino el prestigio de la propia Justicia.