Al pulpo, ni reñirle
En el debatillo sobre cómo va la autonomía, el presidente Chaves no ha querido saber nada –es natural—de lo que se cocía y tal vez se siga cociendo en Marbella, como nada ha querido saber, a pesar del honorable varapalo que le propinó la pobre ministra de Medio Ambiente, de lo que se corta…