Gran movida en Cádiz ante la confirmación de que la Junta de Andalucía, tras tantos años dándole al manubrio del ludibrio, ha resuelto no dotar a la capital con la comprometida Ciudad de la Justicia, lo cual no es ninguna excepción dado que el mismo compromiso se le niega a Sevilla, a Huelva y a tantas otras capitales. Invertir en la Justicia no es rentable electoralmente, además, y la Junta lo sabe, mientras que echar dinero al pozo sin fondo de Canal Sur, por ejemplo, le garantiza una fidelísima “agitprop” como música de fondo del “régimen”. Que Griñán, como sus predecesores, priman sin el menor disimulo a los pueblos que los votan y castigan a los que le niegan su adhesión no es nada nuevo. Lo raro es el poco tiempo que ha tardado el consejero-fiscal De Llera en aprenderse esa regla.