Mano de santo
Mano de santo o mano diabólica –decida cada cual–, la prescripción está resultando el comodín de muchos en la timba de la corrupción. Un nuevo caso hemos visto este fin de semana y Dios dirá cuántos veremos de aquí a que la granada del “caso ERE” sea, por fin, engullida en lo fundamental, grano a…